Venga, veci. ¿Qué le ofrecemos?
El chuchaqui del día me obligaba a probar el encebollado: el último plato de la carta que me quedaba por comer, obviamente acompañado con una cerveza. Mi expresión, consecuencia de unos vinitos de más de la noche anterior, me delató con el chico de la caja, quién me sugirió un shot de caña con ají que me iba a ayudar con la trasnochada. Acepté con un poco de susto, y qué bueno fue hacerlo, porque…